Cómo usar temario común en oposiciones Administrativo: saca ventaja al preparar varias convocatorias

SI te estás preparando para ser auxiliar administrativa o administrativo, seguro que ya te has dado cuenta de que el temario no siempre es idéntico en todas las convocatorias. Cada ayuntamiento, diputación, comunidad autónoma o ministerio saca sus propias bases. Pero aquí viene lo interesante, así que presta atención: hay una buena parte del contenido que se repite. A eso se le llama temario común. Y si sabes jugar bien tus cartas, puedes aprovechar los temas comunes en oposiciones para multiplicar tus posibilidades sin estudiar desde cero cada oposición.

En este artículo, vamos a hablar de qué son los temas comunes en oposiciones administrativas, por qué son tan importantes y cómo puedes usarlos a tu favor para preparar varias oposiciones administrativas con el mismo temario. Te lo voy a explicar de manera sencilla, como si se lo contara a un amigo que está empezando.

¿Qué son los temas comunes y por qué importan?

Cuando miras cualquier convocatoria de oposiciones de administrativo, te vas a encontrar con dos bloques: la parte común y la parte específica. La parte común suele incluir materias que aparecen en casi todos los exámenes de la Administración Pública. Por ejemplo:

  • Constitución Española: artículos básicos, derechos fundamentales, estructura del Estado, Cortes Generales …
  • Derecho Administrativo: Aquí viene todo lo relacionado con el Procedimiento Administrativo Común (Ley 39/2015 y Ley 40/2015), recursos administrativos, actos administrativos…
  • Función Pública: Abarcando todo lo que es el empleado de las Administraciones Públicas, como el Estatuto del Empleado Público (más conocido como el EBEP), deberes, derechos, situaciones administrativas…
  • Transparencia y protección de datos: O sea, leyes relacionadas con el acceso a la información, tratamiento y protección de datos personales.

Estos bloques son «comodines»: estudies para donde estudies, siempre estarán ahí. Por eso, conocer bien los temas comunes oposiciones administrativas es la mejor inversión de tiempo que puedes hacer.

La parte específica , en cambio, es la que varía. Puede centrarse en normativa autonómica, ordenanzas municipales, legislación propia de una universidad, o temas muy concretos del organismo que convoca. Y aquí es donde suele perderse más tiempo: cada convocatoria cambia.

¿Por qué aprovechar los temas comunes en oposiciones es una jugada inteligente?

Imagínate que te tiras seis meses estudiando la Constitución Española y el EBEP. Esos seis meses no son «a fondo perdido». Al contrario: te van a servir para cualquier oposición administrativa, sea estatal, autonómica o local. Eso significa que si una oposición no sale bien, puedes reciclar lo aprendido para la siguiente.

Esa es la gran ventaja de aprovechar temas comunes de oposiciones: maximizas tu esfuerzo. No empiezas desde cero cada vez, sino que vas acumulando conocimiento que vale para varias convocatorias.

Ejemplos claros de temario común en oposiciones administrativas

  1. Constitución Española: No importa si te presentas en un ayuntamiento de un pequeño o en un ministerio de Madrid, siempre va a haber preguntas de Constitución. Y suelen ser bastantes parecidas.
  2. Derecho Administrativo básico: Actos administrativos, procedimientos, recursos… Es el lenguaje universal de la Administración. Da igual dónde trabajes, estos conceptos son la base.
  3. Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP): Regula derechos, deberes, permisos, situaciones administrativas. Imprescindibles para cualquiera que aspire a un empleo público.
  4. Normativa sobre transparencia y protección de datos: Cada vez más frecuente en convocatorias recientes, tanto de Estado como en comunidades autónomas y ayuntamientos.

Con esto ya ves que la parte común no es un detalle menor. Es, en realidad, el núcleo duro que te abre puertas a distintas oposiciones.

La parte común vs la parte específica: cómo equilibrarlas

Aquí viene la gran pregunta: ¿Qué hago, estudio solo la parte común o también la específica? La respuesta es sencilla: hay que encontrar un equilibrio.

  • Parte común: es tu base, tu terreno seguro. Una vez dominas la Constitución, el Derecho Administrativo y el EBEP, ya tienes media oposición hecha. Además, cada repaso sirve para todas las oposiciones.
  • Parte específica: es la que marca la diferencia en cada convocatoria. Aquí es donde se ajusta el corte y donde se ve quién ha preparado realmente esa oposición en concreto. No puedes olvidarla.

Lo ideal es dedicar al principio más tiempo a la parte común, porque se mantiene estable en todas las convocatorias. Y a medida que se acerca un examen, reforzar la parte específica para esa oposición concreta.

Cómo preparar varias oposiciones administrativas con el mismo temario

Ahora vamos a lo práctico. ¿Cómo se hace esto de preparar varias oposiciones administrativas de mismo temario? Aquí tienes un método sencillo:

  1.  Empieza por lo común: dedica tus primeras semanas a estudiar a fondo la Constitución, el EBEP  y el procedimiento administrativo punto haz esquemas resúmenes y tarjetas de memoria. 
  2. Construye una rutina de repasos: la curva del olvido es muy traicionera. si no repasas olvidas. haz repaso semanales de lo común para tenerlo siempre fresco.
  3. Añade la parte específica cuando salga la convocatoria: no pierdas energía en estudiar leyes autonómicas o reglamentos locales hasta que sepas qué oposición vas a hacer una vez publicada la convocatoria, incorpora esos temas concretos.
  4.  Haz test de todo:  test de parte común, test de parte específica, y test mixtos que combinen ambos. Cuanto  más practiques, más reconocerás los patrones de preguntas.
  5. Recicla tu esfuerzo: si suspendes una oposición no pasa nada. Todo lo común que ya dominas te servirá para la siguiente. Solo tendrás que adaptar la parte específica.

 De esta forma, tu estudio nunca es en vano. Siempre suma.

Errores habituales al estudiar el temario común

  1. Subestimarlo: algunos opositores creen que como “es lo mismo de siempre”, no hace falta darle importancia. error dos puntos en muchos exámenes la diferencia está en fallar una pregunta de EBEP  o Constitución.
  2. Estudiar lo específico demasiado pronto: dedicar meses a una normativa autonómica que luego ni entra en la convocatoria es perder tiempo. Primero, lo común.
  3. No repasar: como lo común parece fácil, se deja de repasar y luego en el examen los detalles se olvidan.

Consejos finales para sacar ventaja

  •  Invierte primero en lo común: nunca se pierde, siempre se reutiliza.
  •  Mantén actualizado tu material: la Constitución apenas cambia, pero el EBEP o las leyes de procedimiento si pueden tener reformas. Usa siempre textos articulados.
  • Adapta tu estrategia según plazos: si tienes mucho tiempo, estudia común + específico específico. Si vas justo, aprieta más en lo común, que es lo que más puntos da.
  •  Piensa a largo plazo: aprobar una oposición no siempre se consigue la primera. Pero cada convocatoria en la que participes refuerza tu dominio del temario común, y eso te pone cada vez más cerca de la plaza.

Conclusión

El temario común en oposiciones administrativas es tu mejor aliado.  Si sabes aprovecharlo, puedes preparar varias oposiciones administrativas con el mismo temario y multiplicar tus posibilidades de éxito sin empezar desde cero cada vez. Recuerda siempre el equilibrio entre la parte común y la parte específica: uno te da la base y la otra marca la diferencia.

Estudia con cabeza, repasa lo común, y adapta lo específica a cada convocatoria. Así estarás siempre preparado, no para una sola oposición, sino para todos los que quieras intentar.

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